Ruta por los Balcanes: de Croacia a Bulgaria en 10 días

Llegada a Zagreb y traslado al hotel.

Por la tarde haremos una visita panorámica acompañados de un guía local para conocer la capital croata. Esta visita nos llevará por las dos colinas, la ciudad alta y los nuevos barrios de la ciudad. Después tendremos tiempo libre para ver lo que nos haya faltado. 

Cena incluida.

Dejaremos Croacia para ir a Bosnia por carretera. Después de pasar todos los trámites fronterizos, atravesaremos regiones donde aún quedan vestigios de la Guerra de los Balcanes para llegar a Bania Luka. 

Al llegar podremos pasear por la segunda ciudad más importante de Bosnia. Ahí tendremos la oportunidad de ver sus bulevares y jardines, y también la fortaleza y la catedral ortodoxa. 

Al mediodía nos recibirá el pueblo de Jajce, uno de los más bonitos de todo el país. Este pueblo es característico por su mezcla cultural, y entre sus sitios de interés encontramos su mezquita y su fortaleza. Visitaremos su imponente catarata. 

Finalmente, llegaremos a Sarajevo. Tendremos tiempo libre, durante el cual podremos explorar el encantador bazar otomano, famoso por su arquitectura y su animado ambiente.

Cena incluida.

Nota: Tendremos que llevar el pasaporte a mano para los trámites fronterizos. Además, este proceso se puede alargar por la densidad de tráfico y las esperas en la frontera.

Por la mañana haremos una visita panorámica para descubrir Sarajevo. En la ciudad nos hablarán del conflicto ocurrido en los años noventa mientras caminamos por el centro histórico de gran influencia turca, donde encontramos la gran mezquita de más de 500 años de antigüedad. 

Seguiremos con nuestro viaje por carretera para visitar Mostar. Ahí tendremos tiempo para caminar y almorzar a nuestro ritmo en la pintoresca ciudad. Uno de los enclaves que no nos podemos perder es el puente de piedra que separa las comunidades católicas, ortodoxas y musulmanas que residen en la ciudad. 

Ya por la noche llegaremos a Dubrovnik para cenar. 

Cena incluida.

Después de desayunar tendremos una visita panorámica con guía local para disfrutar de una de las ciudades más bonitas de Europa. Iniciaremos en un mirador en la carretera para tener la primera imagen de la ciudad desde arriba. Continuaremos con una visita a pie del casco histórico, y visitaremos el monasterio franciscano y la catedral. El monasterio guarda la farmacia más antigua de todo el continente. 

Además, tendremos la oportunidad de visitar la isla de Lokrum, que alberga las ruinas de un monasterio benedictino, famoso por haber sido escenario de la serie Juego de Tronos. 

Tendremos la tarde libre.

Cena incluida. 

Nota: durante los meses de invierno (noviembre - marzo), los barcos a Lokrum no operan, por lo cual no se visitará la isla. En algunas ocasiones, el alojamiento podrá ser dado en Cavtat, una localidad próxima.

Viajaremos temprano hasta Montenegro, donde embarcaremos en un ferri para cruzar la bahía de Kotor mientras disfrutamos de los hermosos paisajes costeros. Llegaremos a Kotor, una ciudad que se caracteriza por su influencia veneciana. Dispondremos de tiempo para pasear por la ciudad y descubrir sus encantos naturales y arquitectónicos. 

Seguidamente, continuaremos hacia Budva, una ciudad medieval amurallada que nos recibirá junto con sus ideales playas. Tendremos tiempo para almorzar por nuestra cuenta.

Desde Budva nos dirigiremos a Albania, haciendo una parada en la frontera para descansar mientras tomamos un café. Tendremos la oportunidad de cambiar moneda en ese momento. Terminaremos el día en la capital del país, Tirana.

Cena incluida. 

Después de desayunar, nos espera una vista panorámica por Tirana. Durante el recorrido, veremos mezquitas, la Torre del Reloj y los ministerios de la ciudad. Al finalizar, tendremos algo de tiempo libre para acabar de explorar por nuestra cuenta. 

Seguiremos con nuestra ruta pasando por el lago de Ohrid, un bonito enclave que forma frontera con Macedonia. Cruzaremos la frontera y pararemos en Struga, una de las ciudades a orillas del lago, donde tendremos tiempo para almorzar por cuenta propia. 

Finalmente, nos recibirá Ohrid por la tarde. Se trata de una ciudad que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por su importante influencia otomana. Dispondremos de tiempo libre para conocer el centro de la ciudad, el monasterio de Plaosnik o la antigua universidad de la ciudad, según nos apetezca.

Traslado al hotel a las afueras de la ciudad, junto al lago. Cena incluida. 

Después de desayunar, saldremos hacia Grecia a través de paisajes rurales. Cruzaremos la frontera para llegar a Kastoriá, a orillas del lago, donde tendremos tiempo para pasear por sus calles medievales y admirar sus iglesias.

Seguiremos nuestra ruta hasta llegar a Meteora, famosa por sus monasterios ortodoxos situados en lo alto de pilares de piedra. Tendremos la oportunidad de visitar una de estas construcciones históricas. 

Finalmente, nos dirigiremos a Kalambaka, donde pasaremos la noche. Cena incluida

Hoy pondremos rumbo hacia Salónica, foco de historia y cultura, bañada por las aguas del mar Egeo. Tendremos tiempo libre para pasear y descubrir el legado romano y otomano de la ciudad. 

Después cruzaremos hacia Bulgaria, y continuaremos por la zona montañosa de Pirin hasta llegar a Melnik. En esta pequeña y encantadora aldea podremos disfrutar de paisajes inigualables y conocer las costumbres locales. 

La última parada de hoy será en la ciudad termal de Sandanski, donde disfrutaremos de una agradable cena.

Después de desayunar, abandonaremos Sandanski para dirigirnos a Rila. Conoceremos el famoso Monasterio de Rila del siglo X, enclavado en un parque nacional, rodeado de bosques y montañas. Tendremos tiempo para visitarlo a nuestro ritmo.

Al terminar, saldremos hacia Sofía, la capital búlgara, donde haremos una visita panorámica por los emblemas más destacados. Visitaremos la catedral Alexander Nevski, y veremos la iglesia rusa, la mezquita, las plazas y las principales avenidas de la ciudad.

Tendremos el resto de la tarde libre.

Después de desayunar, pondremos fin a nuestros servicios. 

Si tenéis tiempo, podéis acabar de visitar los encantos de la capital búlgara por cuenta propia.